Con la feria VivaTechnology que se celebra esta semana en París, descubre nuestras profesiones relacionadas con los datos y la tecnología. Un mundo paralelo donde se habla Python sin silbar, donde los «lagos» están hechos de datos y donde las «tuberías» no transportan petróleo, sino flujos de información. Aquí tienes un tutorial rápido elaborado por nuestros innovadores y expertos en datos y tecnología. La buena noticia es que no es necesario haber empezado a programar a los 8 años con Windows 2000 para entenderlo todo.
Ingeniero de ventas, el C-3PO de la conectividad
¿Recuerdas el droide de Star Wars que podía comunicarse de millones de formas diferentes? Los ingenieros de ventas son iguales: traducen las complejas necesidades de los usuarios al lenguaje de los desarrolladores para ayudar a nuestros clientes a integrar nuestras soluciones de conectividad.
Expertos híbridos con una combinación de habilidades técnicas y comerciales, nuestros ingenieros de ventas son embajadores de nuestros servicios Plug & Play, como el asistente digital automatizado Alyx y nuestro catálogo de API para nuestras diversas actividades (seguro de crédito, servicios de información, cobro de deudas) y para nuestros distintos públicos (clientes, corredores, desarrolladores). Ayudan a nuestras partes interesadas a integrar fácilmente nuestra experiencia y nuestros servicios de gestión del riesgo comercial directamente en su ecosistema informático. Tan pronto como un cliente desea configurar un flujo de datos automatizado, un ingeniero comercial de Coface le acompaña desde la formulación de la necesidad hasta la implementación técnica de la solución.
Hoy en día, los directores financieros y los gestores de crédito dan prioridad a la productividad, la automatización, la reducción del riesgo operativo y la ergonomía de las soluciones.
Benoît Henriet, ingeniero comercial de soluciones API de Coface.
Gestor de datos, guardián de la galaxia de datos
El nuevo oro negro de las empresas, los datos son como una piedra preciosa: antes de poder utilizarlos, hay que extraerlos, limpiarlos, estructurarlos y pulirlos. Esta es una de las tareas habituales de nuestros gestores de datos, que trabajan en el corazón del reactor de Coface y tienen un impacto directo en la producción de datos. Las tuberías que construyen, como el Virtual Lake y el Internal DataMarketplace de Coface, proporcionan a nuestros equipos comerciales, informáticos, economistas e incluso a nuestros clientes y socios conjuntos de datos limpios y utilizables.
Dentro de la Oficina de Datos, coordinan la recopilación, el análisis, la gobernanza, la accesibilidad, el almacenamiento y el uso de los datos procedentes de nuestras diversas fuentes en todo el mundo.
¿Su «pequeña» victoria diaria? Proporcionar a los usuarios los datos adecuados, en el lugar adecuado, en cualquier momento y con total autonomía.
«Es como ordenar tu habitación: cada juguete tiene su sitio, todos saben dónde encontrarlo y nada se pierde. Si prestas un juguete, sabes a quién pertenece y cuándo debes devolverlo. La gobernanza de datos es lo mismo: organizar los datos para que todos puedan encontrarlos y utilizarlos de forma segura.
Samia Boujatioui, directora de gestión de datos en la Oficina de Datos de Coface.
Analista de datos, el narrador de datos
El analista de datos es un narrador de números: cuando tú ves una aburrida hoja de cálculo de Excel con 500 filas y 300 columnas, él ve una historia (que tiene sentido) y oportunidades de negocio. Interpreta lo que significan los datos y, sobre todo, lo que se puede hacer con ellos. Los analiza para identificar tendencias (comportamiento de pago, historial crediticio) o anomalías (señales débiles de riesgo de impago) y generar insights. Son expertos en Power BI y dan sentido a los datos mediante la creación de paneles de control inteligentes, visualizaciones e informes basados en análisis avanzados.
En Coface, los datos no son activos intangibles almacenados en una nube, sino la materia prima de nuestro modelo de gestión de riesgos, que se utiliza en todas nuestras actividades: seguro de crédito, servicios de información y cobro de deudas.
Nesrin Gonin, directora de Servicios de Información para Europa Occidental y África.
Data&Tech ep3 - Nesrin Gonin
Desarrollador informático, el Gandalf de nuestra era
Front-end, back-end, full-stack... Sea cual sea su clan, los desarrolladores escriben el código que da vida y mantiene en funcionamiento las aplicaciones, los sitios web, el software y otros portales de Coface. Estos Gandalf del siglo XXI hablan un lenguaje que pocos entienden (JavaScript, Angular o Python), pero del que todos nos beneficiamos. Ya sea diseñando una herramienta de toma de decisiones, una nueva funcionalidad o una plataforma de servicios, trabajan con el mismo trío ganador: el diseñador UX/UI (para la interfaz y la experiencia del usuario), el Product Manager (para saber qué construir) y el Data Scientist (para integrar los modelos de IA). El objetivo es ofrecer una solución de valor añadido a nuestros clientes y proporcionar una experiencia de usuario enriquecida y personalizada.
Nuestra función es simplificar el uso de nuestros servicios para nuestros clientes y socios, y permitirles interactuar fácilmente con Coface.
Emmanuel Delagneau, director de Desarrollo y Arquitectura de Soluciones.
En Coface, desarrollamos soluciones para nuestros usuarios directos (clientes y socios), así como para otras partes interesadas internas, con el fin de personalizar y adaptar mejor nuestros servicios a su entorno informático.
Diseñador UX/UI, el Steve Jobs de la experiencia de usuario
A menudo se les confunde con estilistas, pero el diseño digital no es solo estética. En el mundo del diseño UX/UI, no dibujamos ropa, hacemos que las pantallas se deslicen con estilo. Discípulos de Steve Jobs, los diseñadores UX/UI guían el diseño de un sitio web, un software o una aplicación para transformar un laberinto digital en un paseo por el parque utilizando métodos de diseño centrados en el usuario:
- UX (experiencia de usuario): el recorrido, las búsquedas prioritarias, la accesibilidad
- UI (interfaz de usuario): la ergonomía, las ventanas, los botones, los enlaces y todos los demás elementos textuales o gráficos con los que interactuará nuestro usuario.
Su función es crear interfaces que se anticipen a las necesidades de los usuarios y ofrezcan una experiencia personalizada y distintiva. Cada píxel tiene un propósito, cada interacción debe ser intuitiva y cada clic debe ser obvio. Para lograrlo, analizan cómo interactúan nuestros usuarios con nuestros productos o servicios, diseñan prototipos para probar conceptos y supervisan constantemente las nuevas tendencias tecnológicas. ¿Su principal reto diario? Convencer a sus compañeros desarrolladores de que un botón 2 píxeles más grande revolucionará la experiencia del usuario de la aplicación.
Arquitecto de software, el gran maestro del Tetris de última generación
Sí, también utilizan reglas y dibujan planos. Pero los arquitectos de software los utilizan más como Christopher Nolan utiliza el código. Al igual que el director de Origen, diseñan estructuras complejas y multinivel que encajan a la perfección. Para cada pieza de software desarrollada por Coface, el arquitecto construye la infraestructura informática invisible pero esencial: conecta bases de datos, automatiza los flujos de información y se asegura de que todo llegue a su destino sin errores ni atascos. En resumen, ensamblan los bloques de construcción (capas de software) como un profesional del Tetris NextGen.
En general, se trata de garantizar la seguridad y la escalabilidad de nuestro sistema de información, nuestro software y nuestros datos, en consonancia con nuestro negocio y las necesidades de nuestros clientes. Por ejemplo, como arquitecto de API, mi función es garantizar que los distintos componentes de software puedan intercambiar datos fácilmente entre sí a través de pasarelas estandarizadas denominadas API.
Yvan Bissombolo, arquitecto API en el departamento de Tecnología Empresarial de Coface.
Analista de negocios, el decodificador
Es la persona que transforma tu «quiero un módulo sencillo» en 50 páginas de especificaciones funcionales y técnicas. En resumen, el analista de negocios es la pieza esencial del rompecabezas entre las necesidades genéricas de nuestros clientes o equipos comerciales y el desarrollo de soluciones tecnológicas concretas por parte de nuestros equipos informáticos.
Con la sabiduría del profesor Xavier guiando a sus X-Men, el analista de negocio desempeña un papel clave en todos nuestros proyectos de transformación digital: guía a los desarrolladores, testers y gestores de proyectos informáticos para evolucionar y simplificar nuestros productos, operaciones y modelos aprovechando las tecnologías más avanzadas.
Product Owner (PO), el director de la sinfonía tecnológica
A medio camino entre un creativo y un geek, el Product Owner es el director de una versión start-up de una orquesta filarmónica. Dirige el equipo de producto utilizando un método ágil (Scrum en particular) para mejorar y generar valor para el sitio de producto del que es responsable. El PO no necesariamente programa, pero lo entiende todo. Combina la visión estratégica y la ejecución operativa, y actúa de enlace entre los equipos técnicos (desarrolladores, diseñadores, arquitectos de software), los expertos en negocios (analistas de negocios), los equipos de ventas (desarrollo de negocios, marketing) y los clientes. Con el objetivo de desarrollar nuevas funciones, gestiona las prioridades y los plazos («urgente», «muy urgente» o «extremadamente urgente») para establecer la hoja de ruta del proyecto, al tiempo que simplifica los procesos para desarrollar nuevas funciones.
Ingeniero de ciberseguridad, el ciberninja en las sombras
Mientras todos los demás están ocupados gestionando los flujos de datos, el ingeniero de ciberseguridad vigila todo. En los oscuros callejones de la web, rastrea los ciberataques y a los hackers como Batman vigila Gotham. Siempre armado con un firewall o XDR (mecanismos de ciberdefensa), protege los datos, los sistemas y la reputación de Coface contra las ciberamenazas.
El día a día de un ingeniero de ciberseguridad se parece un poco a jugar a Assassin's Creed una y otra vez: un ciberninja invisible que defiende los activos digitales de Coface. Cada día se enfrentan a hackers cada vez más creativos que utilizan la IA para perfeccionar sus ataques. Y en nuestra era hiperconectada, en la que el ciberriesgo es uno de los riesgos más críticos para las empresas, los expertos en ciberseguridad deben luchar contra todo un ejército de enemigos y amenazas cada vez más sofisticadas.
El reto consiste en detectar los ataques reales entre cientos de alertas diarias y millones de señales débiles. Las amenazas evolucionan muy rápidamente, vinculadas a las nuevas tecnologías. Basta con fijarse en la lacra del ransomware. Muchas empresas (¡incluso en el sector tecnológico!) han sido víctimas de ciberataques. Además del perjuicio económico, esto suele traducirse en el robo de datos o incluso en la pérdida de soluciones tecnológicas para las empresas.
Yoann Mourin, ingeniero de seguridad informática en el departamento de Tecnología Empresarial de Coface.
Ingeniero de aprendizaje automático, el formador de algoritmos
Para él (y solo para él, no nos dejemos llevar), Black Mirror está lejos de ser el futuro: en el mejor de los casos, es un reality show, o incluso un documental retro en el peor. Los ingenieros de aprendizaje automático entrenan modelos de científicos de datos (muy parecido a como solíamos entrenar a nuestros Pokémon) para inventar herramientas prácticas innovadoras o soluciones predictivas. ¿Su objetivo? Hacer que la IA sea más inteligente (¡y más autónoma!) que nuestros Tamagotchis después de 10 años de entrenamiento y alimentación con datos.
Al igual que el Dr. Strange, manipula dimensiones invisibles (vectores, matrices, probabilidades), invoca patrones complejos y predice el futuro con algoritmos bien entrenados. En el sector del seguro de crédito, es él quien dice: «Según mi algoritmo, este cliente tiene un 87 % de probabilidades de no pagar en un plazo de 90 días». ¡Y (casi) siempre acierta!
En Coface, los ingenieros de aprendizaje automático participan en todo, desde la creación de modelos de puntuación predictiva para anticipar el riesgo de impago y morosidad hasta la integración de la tecnología OCR (reconocimiento óptico de caracteres) para automatizar el análisis de los 70 000 archivos de cobro que gestionamos cada año.
Científico de datos: el druida moderno
Elegido el trabajo más sexy del siglo XXI por la revista Harvard Business Review, el científico de datos se encuentra a medio camino entre Panoramix y Alan Turing. Lee el futuro a través de líneas de código, haciendo malabarismos con análisis avanzados, puntuaciones predictivas y aprendizaje profundo para transformar materias primas (el famoso Big Data) en soluciones tecnológicas de vanguardia. Totalmente bilingües en Python o cualquier otro lenguaje de programación, analizan e interpretan datos combinando algoritmos, estadísticas, modelización y aprendizaje automático.
En Coface, nuestros científicos de datos utilizan nuestros datos enriquecidos para diseñar soluciones predictivas que ayudan a la toma de decisiones y personalizan la experiencia del cliente en función de los cambios en su comportamiento y sus necesidades:
No innovamos por innovar. Desarrollamos soluciones a medida de nuestros clientes, aprovechando al máximo nuestros datos. Además, contamos con una arquitectura informática muy sólida que nos permite implementar soluciones con gran rapidez.
Martin Cepeda, científico de datos e ingeniero de aprendizaje automático en Coface Data Lab.
¿Cómo se reconoce a un científico de datos? Por su capacidad para explicar claramente por qué «la correlación no implica causalidad» o para convencer (por 47.ª vez) a su compañero de la otra planta de que su modelo predictivo es superinteligente, ¡aunque no sea capaz de adivinar los resultados de la lotería!
BONUS - La IA generativa, la recién llegada que es (demasiado) habladora
Es la nueva estrella del mundo empresarial, la recién llegada que puede hacer de todo y tiene respuesta para todo (¡a veces incluso demasiada!): escribir, programar, crear imágenes... y muchas otras cosas que forman parte de nuestra «sencilla» vida cotidiana como seres humanos. Un compañero brillante, rápido y superpoderoso, pero que necesita que se le dé una indicación antes de poder actuar de forma independiente. ¡Aunque solo sea para evitar ofrecer un poema en versos alejandrinos a un cliente que espera un presupuesto!
Parece ficción, pero podría convertirse en tu realidad.
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