spa-CL
14/10/2013
Noticias Corporativas

Alemania sigue atractiva / Revista del Campo

Alemania sigue atractiva / Revista del Campo

"Los estragos producidos por las últimas heladas en el sector agrícola se sentirán no solo en lo inmediato, sino en el futuro próximo de la fruta fresca y seca. Las mermas en duraznos, nectarines, ciruelas, kiwi, uva vinífera, paltas, manzanos, ciruelas, almendras y nueces fueron catastróficas. A ello se suma, no solo la consecuencia del desmedro financiero que sufrirá el sector exportador en las pérdidas inmediatas por la imposibilidad de cosechar y exportar sus frutos, sino también en la recuperación de las plantaciones y particularmente en las futuras vendimias, y producción de vino y aceite de oliva. En ese contexto, este sector gravitante de la economía nacional debe estar más que nunca atento a sus compradores y a los destinos de mayor seguridad para el retorno seguro de sus divisas", explica Louis des Cars, CEO Coface Chile.

Desde ahí, Alemania, con una población de casi 82 millones de personas y una actividad económica que ha comenzado a recuperarse, sigue siendo un país favorable para los envíos de los exportadores. A pesar de su bajo crecimiento de un 0,3%, Coface la tiene en clasificación A1, la mejor nota por el buen comportamiento de pago por parte de las empresas, como también la sanidad macroeconómica.

Este segundo semestre partió con buenos indicios, debido al leve incremento del consumo de los hogares, beneficiados por los aumentos salariales y una política fiscal más bien acomodaticia, indican en Coface. "Por ejemplo, se aumentó el límite del impuesto sobre la renta como la pensión mínima y las madres que optan por quedarse en su casa para cuidar de los niños recibieron un subsidio. En otro ámbito, a pesar de la considerable inmigración, el desempleo no se espera que aumente. En un mercado laboral todavía apretado, las empresas prefieren retener a sus empleados, incluso si es necesario mediante las disposiciones públicas que compensan el trabajo a tiempo parcial. A ello se suma la baja inflación que también favorece el consumo. Por ello, las importaciones estarían acelerándose ligeramente en consonancia con la demanda doméstica", comenta Des Cars.

A todo lo anterior se agrega que el comportamiento de pago de las empresas sigue siendo satisfactorio, en virtud de la buena rentabilidad y autofinanciación, comenta el informe de Coface. "El número de quiebras ha caído al nivel previo a la crisis. Las PYMES han tenido un rol preponderante en el desempeña de la economía regional, donde pueden obtener créditos de parte de la banca, de las cooperativas, de las mutuales y/o de las cajas de ahorros; que los conocen bien y responden positivamente a sus obligaciones financieras. Por otra parte sus productos son de alta gama, lo que les permite retornar los gastos en investigación y desarrollo, posibilitando a las empresas controlar sus precios", sostiene.

Otros indicios positivos son que el superávit comercial es positivo. "Ello no es menor, dado que las exportaciones representan la mitad del PIB y su reactivación podría seguir retrasándose debido a la lenta demanda en gran parte del continente. El fuerte crecimiento de las ventas a países no europeos podría parcialmente compensar la disminución o débil crecimiento de las ventas en los países del continente", indica Des Cars.

De hecho, un 37% de las exportaciones alemanas se concentran en la eurozona, un 20% en el resto de la Unión Europea, un 7% en los Estados Unidos y un 6% en China.

Todo lo anterior hace que Alemania se mantenga como un destino al que los exportadores nacionales deben seguir poniendo atención, y ello implica que se debe cuidar la calidad y las condiciones de lo que se manda, pero además trabajar en forma cercana con el comprador, para tener claro sus características y también su idoneidad como pagador.

"No obstante, el panorama macro aunque no está en plenitud es favorable para los exportadores nacionales, pero para ello deben conocer a cabalidad a su comprador en términos de comportamiento de pago. Y en particular a quienes por primera vez están comercializando en dicho país es clave interiorizarse de las formas de pago", agrega Des Cars.

En Alemania los instrumentos de pago como letras de cambio o los cheques no se utilizan masivamente, por lo que la recomendación es optar por la transferencia bancaria.

"Para los alemanes, una letra de cambio implica una situación financiera precaria y en consecuencia se desconfía del proveedor que lo ofrece como "moneda a cambio". A su vez, los cheques no se consideran un pago como tal sino una "intención de pago". Como la ley alemana ignora el principio de cheques cubiertos, el emisor puede cancelar el pago en cualquier momento y en cualquier terreno. En consecuencia, los cheques protestados son bastante comunes. Letras de cambio y cheques claramente no parecen ser instrumentos de pago eficaces aunque sí evidencian una autorización para que los acreedores puedan acceder a un procedimiento rápido para el cobro de deudas. Por el contrario, la transferencia bancaria es el medio más frecuente de pago. Los principales bancos alemanes están conectados a la red SWIFT, que les permite ofrecer a sus clientes certero y rápido servicio de transferencia de fondos a sus vendedores", indican en Coface.

Descargar esta nota de prensa : Alemania sigue atractiva / Revista del Campo (547,07 kB)
Parte superior